Nos ha parecido muy interesante realizar una actividad relacionada con el recorte, el coloreo y, sobre todo, el desarrollo de la imaginación y la visión abstracta de los más pequeños en una tarea muy utilizada en diferentes medios educativos como el de las antiguas cartillas Rubio de caligrafía, que también tenían dibujos entremezclados (qué tiempos...). Ha sido interesantísimo hacer el experimento educativo de ver a qué edades unen los pequeños los puntos mentalmente para saber de qué dibujo se trata antes de realizar ellos el trabajo, y por otro lado, sirve para aumentar un grado su autoestima, ya que repasando los puntitos, son más autores de los dibujos que nos piden por no saber hacerlos ellos solos. Ha sido muy gratificante y divertido.
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